LOS ANHELOS DEL DELEGADO RAFAEL
LUIS SÁNCHEZ DEL TORO   Fotos: Jorge L. Guibert Gaínza

Bien temprano en la mañana, sin apenas saborear el primer sorbo de café del día, sale a retar el tiempo y los problemas, el joven campesino Rafael Bicet Robert, quien acostumbrado al contacto cotidiano con sus electores siente el agrado de estar siempre a su lado, tanto en los momentos buenos como en los malos, a pesar de sentir insatisfacción de no poder brindarle más para alcanzar mejores resultados en el Plan Turquino.

Un total de 15 años como delegados acumula este joven  médico veterinario, quien después de graduarse en 1991 en el Instituto Superior de Ciencias Agropecuarias en Bayamo, provincia de Granma, volvió a su natal municipio de Palma Soriano para poner en práctica los conocimientos académicos  a favor de mejorar la salud de la masa animal.

Comencé a ejercer la especialidad en la empresa pecuaria Mariano López Sánchez, manifiesta Rafael, quien argumenta que paralelamente empezó a combinar su trabajo profesional con las actividades específicas del Poder Popular donde primero se desempeño como delegado de circunscripción y desde hace cinco mandatos como Presidente del Consejo Popular Las Coloradas.

“Esta tarea es compleja y necesita de mucha comprensión de los electores, a quienes uno representa y responde por sus intereses. Además se hace más compleja cuando se trata del Plan Turquino, como es en este caso de Las Coloradas, un Consejo Popular con una extensión territorial de 148,22 kilómetros cuadrados y una población de más de 2 903 habitantes.

“La economía en esta demarcación tiene en el cultivo del café, su fundamental renglón económico, lo que constituye un desafío ante el programa de la recuperación cafetalera planteada para el 2015. En este sentido, cabe destacar que en esta cosecha se estimaron recoger unas 46 000 latas, cifra que fue materializada, mientras se trabaja para continuar ascendiendo paulatinamente de forma tal que se dupliquen o tripliquen esas producciones”, dijo el joven Presidente.

La infraestructura económica y social de Las Coloradas es vasta. Allí se localizan nueve cooperativas –de ellas siete de créditos y servicios-, tres unidades básicas de producción cooperativas (UBPC), una minindustria, dos panaderías, un combinado de servicios, además de 12 bodegas.

Manifiesta Rafael que igualmente se localizan  10 circunscripciones, incluidas en nueve asentamiento poblacionales, entre lo que figuran Pilón de Cauto, La Guadalupe, La Marsellesa, Resurrección, Candelaria y San Carlos. A ellos se insertan también 13 escuelas primarias, siete consultorios del médico de la familia, 22 campamentos, siete salas de video y televisión, dos panaderías y una farmacia.

La economía del Consejo Popular también tiene sólidas bases en la ganadería, los cultivos varios, los frutales y la forestal, en esta última actividad ya se cuentan con unas 500 hectáreas de bosques naturales. Todos coinciden en que en la actualidad estas ramas están muy por debajo de sus posibilidades potenciales y constituyen retos para el empeño de en un futuro no muy lejano alcanzar el autoabastecimiento alimentario de los pobladores en estas intrincadas montañas.

“Ese es uno de los principales problemas en nuestro Consejo, donde de igual manera están presentes el mal estado de los viales, la crítica situación del transporte de pasajeros y las comunicaciones, además de la necesidad de acopiar todas las frutas y no dejar que se pierda en los campos, así como también reducir al mínimo el hurto y sacrificio de ganado mayor, enfatiza el médico veterinario, quien no deja de reconocer que el anhelo mayor es seguir trabajando fuerte para alcanzar la condición de Comunidad de Referencia del Plan Turquino.

El trabajo en la montaña es duro, reclama de mucho esfuerzo y sacrificio; sin embargo jóvenes como Rafael junto con sus electores salen diariamente a ennoblecer la serranía, conscientes de que su historia y economía constituyen bastiones inexpugnables de la Revolución.